- Mara Cortés, coordinadora de la Licenciatura en Diseño Urbano y Arquitectura del Paisaje del ITESO, señala que el problema de la vivienda en México ya tiene muchos años y se ve agravado por el confinamiento por la contingencia sanitaria.
La arquitectura en las universidades del SUJ es sensible y se compromete con la realidad de desigualdad en el diseño y construcción de las residencias. Un problema crónico de la arquitectura mexicana, pero agravado por el confinamiento del COVID-19, ya que “al interior de las viviendas la convivencia se vuelve muy complicada, se crea un ambiente que incrementa la violencia, los conflictos, la contaminación de los estados de ánimo y la tensión, situaciones que obligan a constructores e instituciones repensar la habitabilidad de las viviendas”.
Lo anterior según Mara Cortés, académica del SUJ en el ITESO, en donde es coordinadora de la Licenciatura en Diseño Urbano y Arquitectura del Paisaje, quien propone la redensificación de bajo impacto en los barrios; que las personas tengan acceso a espacios públicos de calidad y que fomenten el sentido de comunidad; y la toma en serio de posturas en las instituciones para exigir a los desarrolladores construir viviendas con los requerimientos mínimos para su habitabilidad.
Esta visión particular de la arquitectura se fundamenta en las preferencias que distinguen el pensar y hacer del SUJ, en tanto que las disciplinas y saberes de nuestras universidades caminen junto con las necesidades de los grupos más vulnerables, así como crear programas de trabajo para atenuar el deterioro de la casa común que es el medio ambiente. Y la arquitectura en el SUJ contribuye con ese cuidado al proponer formas más dignas y sustentables de habitar el espacio.
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