- El ODEJ perteneciente al SUJ analiza el proceso de retorno a clases presenciales en el nivel básico de educación, particularmente en contextos rurales, después afectaciones de la pandemia COVID-19.
En el retorno presencial a clases en sectores rurales es fundamental priorizar la recuperación del interés del estudiantado sobre el trabajo administrativo que se exige a las y los docentes. Al respecto el Observatorio del Derecho a la Educación y la Justicia (ODEJ) del Sistema Universitario Jesuita (SUJ) analiza, a partir de los datos y la información con que cuenta, el proceso de retorno a clases presenciales en el nivel básico de educación, particularmente en contextos rurales.
El ODEJ recupera del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE, 2014) que el 70% de las escuelas de nivel básico están en medios rurales y fue en ellas donde más afectaciones sociales trajo la COVID 19, destacando el rezago en el aprendizaje y la deserción escolar.
Para el Observatotorio del SUJ, ambos efectos resultaron de la falta de conectividad a internet, la falta de equipo de cómputo o celulares inteligentes, así como la escasez de recursos económicos para poder adquirirlos. De igual forma, influyó de manera importante el bajo nivel educativo de los padres que impidió que pudieran apoyar adecuadamente a sus hijos en las actividades y trabajos académicos.
En el contexto del regreso a clases presencial se han promovido políticas para reincorporar a las y los estudiantes que hubiesen desertado. Sin embargo, la tarea no ha sido sencilla para los profesores, pues los efectos económicos de la pandemia han obligado a muchas familias a que sus miembros más jóvenes se incluyan en el mercado laboral para superar las dificultades económicas derivadas de la crisis sanitaria.
Además de la falta de recursos económicos, tecnológicos y de servicios básicos, los maestros enfrentan el rezago educativo del estudiantado en matemáticas, español y ciencias. De igual forma, los docentes registran que sus alumnos tienen deficiencias importantes en comprensión lectora debido a la falta de práctica en casa.
Para maestros y padres de familia de sectores rurales está siendo muy difícil y polémico el regreso presencial a clases, debido a las condiciones antes descritas, así como por la complejidad que supone organizar el tiempo, los esfuerzos y la creatividad para regularizar a las y los estudiantes.
Desde el análisis del ODEJ, este escenario obliga a priorizar los esfuerzos y capacidades por lo que recomienda primar lo académico sobre lo administrativo; es decir, que se faculte a los maestros para que inviertan su tiempo y energía en promover el aprendizaje de las y los estudiantes y en despertar el interés por su educación. Es necesario que en el trabajo de las y los docentes se enfoque en recuperar y consolidar habilidades y capacidades como comprensión lectora y lógica para que el estudiantado vuelva a ser lector con capacidad de dudar y cuestionar la realidad.
Como SUJ estamos convencidos de la importancia de retomar algunas actividades y procesos importantes para la vida del país. Lograr que niñas y niños retomen adecuadamente sus procesos de formación y socialización es uno de ellos, pero debe realizarse de manera adecuada, cuidada y segura.
Sin duda, el retorno a clases presenciales es uno de los procesos más necesarios y, al mismo tiempo, más delicados por lo que deben garantizarse las condiciones para que los maestros puedan dar adecuado seguimiento a sus alumnos y estos recuperen el interés por retomar sus estudios y avanzar en su formación académica.