Ante la pandemia por COVID-19, México enfrenta sus consecuencias, que en su mayoría golpean severamente a la salud y la economía. No todos pueden permanecer en casa ni cuentan con ingresos fijos; la gran mayoría tiene problemas crónicos, estructurales de la desigualdad, porque se encuentran en zonas marginadas, o son parte de poblaciones históricamente vulnerables como los indígenas, migrantes, refugiados, adultos mayores y mujeres en situación de violencia.
Ante esta situación, el P. Luis Gerardo Moro Madrid, S.J., provincial de los jesuitas en México hace una invitación a sumarse al financiamiento colectivo en la campaña titulada “Seamos Uno con la Tierra”, con el objetivo de impulsar tres acciones que responden a las necesidades detectadas en las misiones indígenas, las parroquias urbanas y suburbanas y las obras sociales. Éstas tres iniciativas son:
1) Impulsar y fortalecer los proyectos de salud comunitaria;
2) Impulsar emprendimientos de economía social y solidaria, e
3) Impulsar la organización territorial y comunitaria.
“Seamos uno con la tierra”, busca atender las nuevas necesidades existentes entre los grupos más vulnerables a través de la Fundación Loyola, y es la continuación de la campaña frente al COVID-19, la cual centró sus esfuerzos en apoyar financieramente a las personas más desprovistas de alimento durante y después de la contingencia.
El P. Moro también agradeció a las personas, empresas e instituciones que se sumaron a la campaña frente al COVID-19. Las muestras de solidaridad lograron que los jesuitas de México pudieran responder a la emergencia y dieran apoyo a 13,876 familias en nueve estados de la República.
Ante las acertadas palabras del P. Luis Gerardo Moro, “Hoy más que nunca, una pequeña acción solidaria puede hacer una gran diferencia en la vida de nuestros hermanos más necesitados”.
Más información para donaciones https://www.fundacionloyola.mx/seamosuno
Somos uno con la Tierra cuando aprendemos a producir diferente y dejamos de dañarla.
Somos uno con la Tierra cuando entendemos que nuestra salud depende de la salud de nuestra Madre Tierra.
Somos uno con la Tierra cuando nos organizamos en comunidad para cuidar y respetar la naturaleza.
Somos uno con la Tierra cuando nuestras acciones buscan que los recursos alcancen para todos, tanto en el presente como en el futuro.
Somos uno con la Tierra cuando nos reconocemos como una comunidad que requiere de la Tierra porque es nuestra casa común.
Vivimos en la Tierra,
seamos uno con la Tierra.
Fotografía de Fundación Loyola