- El equipo de investigación del SUJ, comprometidos con la misión ignaciana, trabaja en proyecto social con estudiantes.
Dentro de la pedagogía ignaciana, un estudiante de una institución del Sistema Universitario Jesuita (SUJ) es alguien que transforma su vida y comienza a transformar el mundo y la vida de los demás. Y quienes se han encargado de seguir esta misión son nuestros docentes, quienes guian al estudiantado para la construcción de soluciones eficaces frente a las necesidades de la sociedad.
Tal es el caso del equipo de investigación del Campo Estratégico y Acción en Modelos y Políticas Educativas (CEA-MOPE), del Sistema Universitario Jesuita (SUJ). Lo integran la Dra. Susana Cuevas de la Garza, de IBERO León; Dra. Laura Bárcena Pozos, de IBERO Puebla; Dra. Hilda Patiño Domínguez, de IBERO Ciudad de México; Dra. Eiko Gavaldón Ozeki, de IBERO Torreón; Dra. Herzel García Márquez, Dr. Luis Fernando Silva Castillo y Dr. Juan Carlos Silas Casillas, por parte del ITESO; y la Dra. Rosario León Medina, responsable de Desarrollo e Innovación de la Práctica Educativa de IBERO Tijuana.
“El CEA-MOPE es una comisión que realiza investigaciones para la toma de decisiones informadas de los rectores en las diferentes instituciones jesuitas. Ya hemos realizado investigaciones sobre compromiso social con los profesores y egresados, ahora el proyecto está dirigido a los estudiantes, y busca indagar sobre, cómo van adquiriendo compromiso social en su estancia en la universidad, mediante un estudio longitudinal”, compartió la Dra. León Medina.
Con la continuidad del proyecto de investigación longitudinal sobre la formación de compromiso social en estudiantes de las universidades del SUJ, han podido trabajar con estudiantes de la IBERO Tijuana. La investigación se realizará en el transcurso de cuatro años, con encuestas e instrumentos que se implementarán con estudiantes de nuevo ingreso, a la mitad de su carrera y al momento de graduarse, para evaluar su progreso en el área del compromiso social, con base en la misión educativa jesuita.
“Este tipo de investigaciones que realizamos se hacen primeramente para que los rectores del SUJ puedan tomar mejores decisiones sobre el proceso de formación de los estudiantes en sus universidades, y para saber si como instituciones jesuitas estamos logrando lo que nos proponemos en materia de incidencia y compromiso social”, subrayó la doctora.
La IBERO Tijuana, al ser una universidad jesuita, busca evaluar el impacto de los valores humanistas e ignacianos en la formación de las y los estudiantes, como distintivo principal en la educación integral.
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