Es necesario un cambio en la estrategia del combate a la pobreza: Investigadores del SUJ

  • Según el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), entre 2018 a 2020, aproximadamente 3.8 millones de personas cayeron en pobreza en México.

 

Académicos e investigadores del SUJ analizan e interpretan los datos ofrecidos por Coneval en su más reciente informe respecto de la pobreza en México. Entre sus hallazgos, consideran que la pandemia no ha sido el único factor que explica el crecimiento de la pobreza en nuestro país: “Achacar a la pandemia el aumento de mexicanos en pobreza queda corto; fueron una serie de factores los que terminaron por acrecentar esta condición que en México ‘ya era sistemática’. El Coneval hizo una ponderación de las políticas sociales del decenio comprendido de 2008 a 2018, abarcando parte del sexenio de Felipe Calderón Hinojosa y todo el de Enrique Peña Nieto. En este ejercicio lo que se demostró es que la política social en México no funciona, la pobreza no aumenta, pero tampoco disminuye. Manteníamos al menos a 50 millones de personas en condición de pobreza y entre ocho y diez millones en pobreza extrema”.

Los investigadores y académicos del SUJ y AUSJAL señalan que la administración federal actual ha implementado acciones con las siguientes características:

  • Modelo universalista que contrasta con el de aplicación focalizada de los dos gobiernos previos.
  • Políticas de fortalecimiento al empleo como el aumento al salario mínimo.
  • Impulso a las reformas en torno al outsourcing que, junto con el incremento de las transferencias directas, apuntaban a resolver el problema de la pobreza.

Sin embargo, la pobreza sigue ahí. En cuanto a las razones por las que el gobierno no ha logrado revertir dicha tendencia, los académicos del SUJ consideran tres aspectos: “Una primera explicación es que no existió crecimiento económico hacia el principio del sexenio, lo cual es una condición necesaria para poder redistribuir la riqueza. A ello se sumó la contracción de la inversión privada debido a la cautela que los grandes empresarios siempre tienen ante un cambio de gobierno. La tercera razón es la pandemia por COVID 19, la cual generó una crisis económica en muchos países del mundo”.

Si bien es cierto que el aumento de personas en pobreza es grave, también lo es que al inicio de la pandemia se calculó que al menos 10 millones de mexicanos y mexicanas caerían en pobreza lo cual, hasta ahora, afortunadamente no ha sucedido: “La moneda está en el aire para saber si tendremos estrategias más acertadas y contundentes para acabar con un problema que afecta hoy en día a por lo menos 55.7 millones de mexicanos y mexicanas. Otro aspecto relevante es que las políticas que se implementan actualmente para el combate a la pobreza y a la desigualdad no están atravesadas por una lógica de derechos humanos, lo cual impide que la ciudadanía pueda distinguir que es una obligación del estado garantizar los derechos de  todas las personas. Es entonces cuando estas acciones se ven más como un regalo del gobierno que como el cumplimiento de obligaciones en materia de derechos humanos”.

Para el SUJ sigue siendo fundamental generar dinamismos que contribuyan a superar la pobreza, distribuir la riqueza, crear y distribuir riqueza bajo un enfoque de bien común, así como la participación igualitaria e incidencia en las decisiones públicas para garantizar la urgente transformación que reclama nuestro país.

Con lo que sabemos y tenemos nos proponemos aliados de iniciativas y decisiones de buen gobierno para construir justicia social y posibilidades de futuros buenos para todas las personas.

es_MXSpanish