- En el “6° Congreso de Construcción de Paz con Perspectiva de Género”, el ex Rector en el SUJ reflexionó sobre la existencia de poblaciones más vulnerables de recibir violencias del Estado.
Especialistas en derechos humanos, en atención psicosocial y derechos de las mujeres se reunieron en el “6° Congreso de Construcción de Paz con Perspectiva de Género” para dialogar sobre posibilidades y alternativas para la construcción de paz en México.
Durante el evento, el Mtro. David Fernández Dávalos, SJ, ex Rector en el SUJ y actual integrante de la Comisión para el Acceso a la Verdad, el Esclarecimiento Histórico y el Impulso a la Justicia de las Graves Violaciones de los Derechos Humanos de 1965 a 1990, señaló que en nuestro país, las violencias ejercidas por el Estado no se dirigen ni afectan de la misma manera a todas las personas.
“Al pasar desapercibidos y ser ignorados hay personas que son más desaparecibles, torturables y eliminables, entre ellas las mujeres, los pueblos indígenas y afromexicanos, así como las personas de la diversidad sexual. Estos sectores de la población siguen siendo poco relevantes en cualquier política, incluyendo las aquellas para el esclarecimiento de la verdad, justicia y construcción de memoria”.
Ahondando al respecto, el sacerdote jesuita y defensor de derechos humanos indicó: “Si se quiere una política justa, legítima y seria debe considerarse a las distintas comunidades de víctimas, de las que también deben considerarse las características personales pues, en muchos casos, esto va a determinar el tipo de violencia que se haya ejercicio sobre ellas, así como las consecuencias que les haya acarreado dicha violencia en el pasado y en el presente”.
Finalizando su intervención, el Mtro. en Sociología insistió en la importancia de investigar, atender y resolver dichos casos bajo un enfoque diferencial o interseccional. A partir de éste se puedan conocer y entender todas las dimensiones y circunstancia que hicieron vulnerable a una persona frente a las violencias del Estado. Además de conocer y entender las implicaciones e impactos que dichas personas sufren por todos los ámbitos de vulnerabilidad a que han sido obligadas a vivir: “el enfoque diferencial o interseccional debe convertirse en un hábito, en una actitud, en una forma particular de indagar, de enfrentar y de resolver las realidades violentas”.
Por otro lado, Clemencia Correa, directora de Aluna Acompañamiento Psicosocial, señaló que los Estados sistemáticamente ocultan la realidad: “los Estados nos mienten, niegan los asesinatos, desapariciones y torturas sexuales, amparan su discurso represivo en la libertad, justifican los actos de terror como respuestas necesarias para la seguridad, y crean leyes para violar los derechos humanos y para legalizar lo ilegal”.
Para reforzar sus reflexiones, la directora de Aluna Acompañamiento Psicosocial citó al jesuita Ignacio Martín Baró quien sostuvo que las violencias se sustentan en una crisis institucionalizada, la negación dela realidad, el fortalecimiento de la polarización y la deshumanización del tejido social: “Bajo esta lógica, los Estados desarrollan estrategias locales, estatales y nacionales basadas en una dinámica militar y psicológica para dominar a la población mediante actos crueles que provoquen miedo pasivo e inhibir la acción de la población frente a la injusticia y dejar de ser solidarios con otros iguales”.
Como SUJ consideramos que el reconocimiento, prevención y erradicación de las violencias requiere de conocer a profundidad las condiciones en que se ejerce y las características que hacen que ciertas sectores de la población sean más vulnerables a recibir las violencias del Estado.
El conocimiento a profundidad de la pobreza, la desigualdad y la exclusión son fundamentales para generar propuestas integrales que saquen de la exclusión en que distintos sectores sociales han sido obligados a vivir. Es una prioridad histórica y de justicia lograr que las mujeres, los pueblos indígenas y afromexicanos, y las personas de la diversidad sexual puedan recolocarse en el entorno social en condiciones justas, equitativas, legítimas y seguras.
Información de IBERO Ciudad de México