- Se destacó su defensa de los derechos de los pueblos originarios frente a la desigualdad, la discriminación y la criminalización
Durante la ceremonia de clausura del XVI Foro de Derechos Humanos del Sistema Universitario Jesuita, realizada en IBERO Tijuana, se entregó el Premio Tata Vasco 2025 a la Asamblea Estatal de Pueblos y Comunidades Indígenas de Baja California, en reconocimiento a su defensa de los derechos de los pueblos originarios frente a la desigualdad, la discriminación y la criminalización.
Este organismo regional fue distinguido por su valiosa labor como movimiento que visibiliza y exige la implementación efectiva de derechos de los pueblos originarios, en un estado caracterizado por la migración, el desplazamiento y una profunda diversidad cultural. A lo largo de su trayectoria, han construido en Baja California un camino de resistencia y organización colectiva, conformado por comunidades Ñuu Savi, Triqui, Zapoteca, Purépecha, Cucapá y afrodescendientes.
“La esperanza se construye a fuego lento, con acciones que transforman y con comunidades que no se rinden ante la injusticia.” Dr. Alexander Paul Zatyrka Pacheco, S.J.
Su trabajo los ha consolidado como un referente en la defensa de los derechos humanos, con presencia tanto en contextos urbanos como rurales, impulsando la representación política y la autonomía indígena. El Mtro. Juan Luis Hernández Avendaño, Rector de la IBERO Torreón, destacó que la organización ha sabido “construir unidad en la diversidad” y resistir “en un contexto de autoritarismo y discursos antiderechos”. “Ustedes —dijo— son buena noticia en su territorio; hacen política en su sentido más noble: cuidar a la comunidad. Han decidido resistir, y resistir hoy es una forma de victoria: la victoria de la esperanza en movimiento”.
En representación de la Asamblea, Jessica Michel Silva Godoy, joven del pueblo cucapá, agradeció el reconocimiento y afirmó que el premio les motiva a seguir luchando “por los derechos humanos, la participación política y la defensa del territorio y los saberes ancestrales”.
Foro deja luz de esperanza al visibilizar trabajo de comunidades y jóvenes
En el mensaje final, el Rector del ITESO, Dr. Alexander Paul Zatyrka Pacheco, S.J., subrayó que la defensa de los derechos humanos enfrenta nuevos desafíos ante “la militarización del Instituto Nacional de Migración y la indiferencia de las autoridades”, que favorecen la violencia y la explotación de personas en movilidad.
Reconoció, sin embargo, que este Foro del SUJ —organizado por la universidas del SUJ— dejó una luz de esperanza al visibilizar el trabajo de organizaciones, comunidades y jóvenes que defienden la dignidad humana.
“El Foro nos recordó —dijo— que la esperanza se construye a fuego lento, con acciones que transforman y con comunidades que no se rinden ante la injusticia”.
El presídium estuvo integrado por la Mtra. Lorena Giacomán Arratia, Asistente de Educación de la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús; el Dr. Luis Arriaga Valenzuela, S.J., Rector de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México–Tijuana y TUVCH; el Dr. Alexander Paul Zatyrka Pacheco, S.J., Rector del ITESO Universidad Jesuita de Guadalajara; el Mtro. Luis Alfonso González Valencia, S.J., Rector de IBERO León; el Dr. Alejandro Guevara Sanginés, Rector de IBERO Puebla; el Mtro. Juan Luis Hernández Avendaño, Rector de IBERO Torreón; la Dra. María Adriana Jiménez Romero, Directora General del Tecnológico Universitario del Valle de Chalco (TUVCH); y el Mtro. Florentino Badial Hernández, Director General de IBERO Tijuana, sede anfitriona del encuentro.
Para la clausura del 16 Foro de Derechos Humanos SUJ, el rector de ITESO, Dr. Alexander Paul Zatyrka Pacheco, S.J., compartió una reflexión sobre los temas tratados en fortalecimiento al gran compromiso social con los derechos humanos: “Todas estas iniciativas y proyectos que hemos visto en este foro nos permiten soñar con un mundo más justo, equitativo, y esperanzador. Aunque en esta ciudad de frontera hemos visto luces y esperanza en torno a la lucha por los derechos humanos, somos conscientes de que queda mucho trayecto por avanzar”, señaló.
“Este foro nos permitió entender mejor el fenómeno migratorio como parte del permanente análisis de la realidad que debemos realizar las universidades e instituciones, pertenecientes a la Compañía de Jesús. También nos permitió estrechar lazos entre nuestras universidades y con las organizaciones y personas e iniciativas, comprometidas con la defensa los derechos humanos y la justicia social”, destacó en el cierre del programa, junto a los rectores, directivos y comunidad universitaria jesuita.
Información de IBERo Tijuana e IBERO CDMX
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