- Es importante voltear a ver a los grupos más vulnerables que ha ido dejando la pandemia.
- La economía social y solidaria es un sistema alternativo que apuesta por tener relaciones más inclusivas y más equitativas.
El foro “Repensar lo social para afrontar la pospandemia COVID-19”, en el cual participaron universidades del SUJ propició un espacio de reflexión sobre los cambios que la sociedad necesita realizar para adaptarse a las nuevas condiciones emergentes después de la pandemia del COVID-19, y a los cambios de perspectivas y horizontes sobre lo social a que se verá empujada la humanidad por esta primera gran emergencia sanitaria mundial.
Se hizo patente, en este nuevo escenario urdido por la pandemia, la necesidad de contar con una mayor inversión en protección social, la exigencia de ser creativos para repensar la protesta, no caer en narrativas alternas, y defender el derecho al territorio.
El foro contó con la participación de los rectores del SUJ, el Mtro. David Fernández Dávalos, S.J., de la Universidad Iberoamericana Ciudad de México-Tijuana; el Mtro. Mario Ernesto Patrón Sánchez, de la Universidad Iberoamericana de Puebla; y el Dr. Luis Arriaga Valenzuela, S.J, del ITESO Guadalajara.
El Mtro. Fernández Dávalos se refirió a la oportunidad que tenemos para repensar lo social desde la pandemia, en el sentido de que ella nos permitió “reconocer el tejido social roto y al mismo tiempo nos ha urgido a reapropiarnos de nuestro territorio, para gestionarlo de manera autónoma”.
Al respecto mencionó las consecuencias del confinamiento en cuanto profundiza el desplome de la economía de nuestros países, ya que sólo en México, por ejemplo, se estiman 5 millones más de desempleados como resultado del COVID-19.
Asimismo, la pandemia ha revelado con toda su brutalidad el desmantelamiento del estado de bienestar, y la destrucción de los sistemas de salud y de seguridad social. Lo anterior mientras el paso de la enfermedad incrementa la desigualdad, la violencia hacia las mujeres y la infancia, los ataques al personal de salud; aumenta el número de pobres en todo el planeta y crecen las necesidades básicas.
Por su parte, el rector de la IBERO Puebla, el Mtro. Patrón Sánchez, manifestó que México vive nuevas y viejas pandemias; de hecho, observó, las más longevas como la violencia y la pobreza generan más decesos de los que causa el coronavirus.
Un tema presente entre los rectores durante las jornadas de reflexión fue el de las Redes Vecinales de Solidaridad (REVES) y la importancia de los sistemas de reactivación económica para la comercialización local.
También se puso la mirada en lo jóvenes y los múltiples escenarios de vulnerabilidad en los que están inmersos, como la violencia intrafamiliar, la distribución y el consumo de drogas, los embarazos prematuros, y la presencia en sus entornos del crimen organizado. Realidades que exigen diseñar y realizar proyectos con honda incidencia social.
El último día del foro, coordinado por el ITESO desde el Centro Universitario por la Dignidad y la Justicia Francisco Suárez, S.J. (CUDJ), se analizaron los efectos del COVID-19 en los derechos humanos, que alentó el diálogo sobre la reconstrucción del tejido social y la economía solidaria.
Sobre esta relación de pandemia y derechos humanos, el rector del ITESO, el Dr. Luis Arriaga Valenzuela, S.J., señaló que la pandemia ha impactado en el goce de los derechos humanos en México y en el mundo. Lo anterior aboca a las universidades confiadas a la Compañía de Jesús a estudiar las consecuencias que tendrá la COVID-19 en la población más vulnerable, y señaló que la situación tiene muchas aristas que obligan a analizar los distintos impactos para identificar los aspectos estructurales.
Texto por Carlos Mario Castro
Foto de Ramón Tecólt González, IBERO Puebla