- Universidad del SUJ, IBERO León, difunde documental sobre infancias buscadoras de personas desaparecidas en México
- La realidad mexicana ha obligado a muchas niñas y niños a sumarse a la búsqueda de familiares y amigos que han desaparecido.
Cifras oficiales señalan que en México existen aproximadamente 95 mil personas desaparecidas. Cada una de esas personas tenía vínculos y afectos con otros, muchos de las cuales son niños, niñas y adolescentes.
Si bien la mayoría de las personas que buscan a sus desaparecidos son adultos y adultas, es cada vez más común ver a niños, niñas y adolescentes en las actividades técnicas de búsqueda, así como en las acciones sociales y políticas para reclamar a los poderes públicos su adecuada y oportuna prevención, investigación, sanción y reparación del daño.
Debido a la relevancia del tema, IBERO León abrió su espacio para difundir el documental Quiero saber de ti; Niñez buscadora en el que se muestra cómo es que en nuestro país, niños, niñas y adolescentes se han visto obligados a sumarse a las brigadas y colectivos de búsqueda de personas desaparecidas.
El autor del documental, David Santa Cruz, es un periodista especializado que recientemente ha realizado investigación para documentales de televisión como el caso de Quiero saber de ti; Niñez buscadora.
Como SUJ vemos con preocupación creciente el que las infancias mexicanas, gravemente vulnerabilizadas por la pobreza y por la pandemia, también estén siendo afectados por las implicaciones de la desaparición de personas en el país.
En México hay niños y niñas de hasta 10 y 11 años expertos en desaparición de personas, y que han tomado varillas, picos, palas y cribas para buscar en la tierra los posibles restos de sus padres, madres, tíos, hermanas, amigos.
Si bien el Protocolo Adicional de Búsqueda de Niños, Niñas y Adolescentes establece que niños, niñas y adolescentes tienen el mismo derecho que los adultos a ser informadas y participar de la búsqueda de sus familiares, como SUJ vemos muy grave que el fallo de los sistemas públicos obligue a que las infancias mexicanas deban enterarse y a entender qué son las desapariciones, cómo hacer búsquedas, y a ejercer los instrumentos legales que existen para lograr localizar a sus seres queridos.
Ningún niño, niña y adolescente debería sufrir la pérdida de su familiar y, menos aún, debería verse obligado a buscarle debido a la incapacidad de los poderes públicos para prevenir las desapariciones, para la localización de las personas desaparecidas, así como para la ejecución de investigaciones y sanciones de las personas relacionadas con la desaparición de personas en México.